Muchas veces me he preguntado si lo que vemos, nuestra realidad cotidiana es lo que existe en realidad. Desde bien pequeño. La verdad es que me rallé cuando vi Matrix la primera vez... reflejaba en parte lo que había estado pensando tanto tiempo. Es inquietante pensarlo. Imaginaros que la silla de vuestra habitación es una silla solo en tu cerebro y en la realidad que nuestro organismo no es capaz de percibir es una cosa totalmente diferente, con colores totalmente diferentes, recordemos que los colores de las cosas que nosotros vemos son solo las longitudes de onda que los objetos no son capaces de absorber y se reflejan, pero, eso para el ojo humano. ¿Que color tendrá la madera de la silla en verdad? ¿Tendrá color alguno?. Este tipo de dudas dan pie a miles de millones más de dudas por el estilo, la conclusión a la que se podría llegar a raíz de ellas es que lo que vivimos, nuestra vida, es en realidad una pequeña o gran farsa, en la que interpretamos nuestro papel en base a unos guiones pre-establecidos. Puede ser que sea divagar demasiado, o parte de una filosofía, el nihilismo.
Etimológicamente procede de nihil (nada). Argumenta que la existencia del ser humano y el propio ser humano no poseen de manera objetiva ningún significado. La realidad es incognoscible por lo que entenderla será inutil en lo práctico y carente de sentido en lo teórico. Solo existe la nada. De este tipo de teorías han surgido verdaderos modos de vida. El más característico es el Punk, lemas como "No Future" o "Anti Todo" lo dejan claro. El objetivo es disfrutar en la vida todo lo que se pueda sin pensar jamás en un futuro hipotético, exprimiendo el presente sin pensar las consecuencias que pueden acarrear tus actos ya que sólo existe el presente. En fin, de unas cosas he ido a otras, sólo quería descargar un poco, espero no haberos aburrido mucho.
2 comentarios:
Es evidente, bajo mi punto de vista, que existe algo espiritual. Unas leyes universales que justificarán como hemos vivido cuando hayamos muerto.
descartes¿
Publicar un comentario