

Para seguir con la racha de publicidad provocativa, aquí os presento una campaña de 3M (creo que es de 2006) en la que la marca confía tanto en la resistencia y fuerza de sus cristales de seguridad que se atreve a almacenar dinero entre ellos. Y estamos hablando de dinero de verdad, dinero canadiense.
La primera foto está tomada en un urinario público y la segunda es de una marquesina de una parada de buses de cualquier calle. A mi me ha parecido algo novedoso, llamativo y desde luego que convincente, a vosotros?
5 comentarios:
La verdad es que hay marcas que son capaces de de venderle un peine a un monje.
Aunque todo el mundo sabe que el dolar canadiense ¡¡¡no vale nada!!! xD
:O que bueno!
cuantos monopolis utilizaron?
Eso me parece muy fuerte y que nadie se atreviera a dar un golpe eso es lo que mas me soprende.
un saludo.
la marquesina se encuentra en Vancouver y la verdad es que sí, la publicidad de esos cristales blindados es muy convincente.Me parece que es de algún año más atrás...
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